Internet ha provocado grandes cambios en la forma de crear información. Por un lado, cobra cada vez más importancia el redactor online para SEO, que va sustituyendo poco a poco al periodista de toda la vida. Y por otro, el antiguo lector de café y tostada es ahora un usuario que lee en diagonal en su dispositivo móvil. Pero no te voy a aburrir hablando aquí sobre la situación actual de los medios de comunicación.
Quería empezar por este tema, simplemente, para puntualizar que soy periodista. Sí, pero periodista reciclado, de los que prefiere subirse al carro de las nuevas oportunidades que genera Internet. Y una de estas oportunidades es la creación de contenidos orientada al SEO (Search Engine Optimization, es decir, textos optimizados para el posicionamiento en buscadores).
Actualmente, crece la demanda de empresas y agencias que demandan un redactor online para SEO, capaz de escribir encargo y a distancia. Y ese es precisamente mi servicio, pactando unos objetivos con el cliente (contigo, espero). Y el cliente puede disponer de textos de calidad a un precio razonable para su web o su blog.
Mis textos son siempre originales y fáciles de leer, ofreciendo información útil y una estructura clara. Así lo aprendí durante la carrera de Periodismo (Universidad Carlos III de Madrid). Y en ello me reafirmé después de lograr el Certificado en Marketing Digital de Google e IAB Interactive Advertising Bureau.
El link baiting: esa es mi apuesta como redactor online para SEO. Es decir, no uso programas que generan automáticamente trillones de enlaces, ni software que hace refritos de otros textos a base de sinónimos, ni tiro de Google Translator para traducir textos del swahili y hacerlos pseudo-originales.
Déjame recordarte brevemente que las claves para que una página web aparezca en los primeros resultados de los buscadores, especialmente en los del San Google, son dos:
1) Que el contenido de la página web que quieres posicionar (landing page) esté optimizado con palabras clave, escritas en el lugar correcto y en la cantidad adecuada (densidad de keywords). Por ejemplo, si tu web trata de un hotel en el centro de Madrid, estas palabras clave pueden ser “hotel céntrico en Madrid”, “hotel cerca de la Puerta del Sol” o cualquier otra que tú elijas, siempre teniendo en cuenta la cantidad de búsquedas mensuales que generan esos términos y la competencia que existe actualmente para ellos. Pero eso es ya otra historia.
2) Que recibas muchos enlaces entrantes (backlinks) desde otras páginas web. Bueno, desde los últimos cambios de algoritmo que trajo consigo Google Panda y Google Penguin, en vez de “muchos enlaces” debería decir “muchos enlaces de calidad”. Esta ardua tarea se conoce como link building y en muchas ocasiones esta labor va más allá de la redacción de textos. Así que dejémoslo para más adelante porque sería otro nivel de colaboración.
Pues bien, hasta ahora muchos especialistas en posicionamiento optaban por ir dejando enlaces entrantes allá por donde pasaban: foros extraños, directorios ininteligibles, etc. Pero mi convicción como redactor online SEO es otra: generar artículos optimizados y de calidad, con valor añadido e información útil para los lectores. Solo así se irán generando backlinks de forma natural: a la audiencia le gustará tu contenido y, por tanto, te enlazará, recomendándote a otros.
Pues no pasa nada, olvida todo lo que he dicho sobre lo que debería ser un buen redactor online para SEO. Entonces, en los textos que te entregue no me preocuparé por seguir las normas sobre densidad de keywords y demás términos raros que he mencionado hasta ahora. Pero tranquilo: la calidad (o mi esfuerzo por conseguirlo) será igual, con la misma intención de generar contenido interesante para los lectores. Así lo puedes comprobar en mi portfolio, donde verás que colaboro con medios de comunicación muy variados, sin seguir estos parámetros.
Y ahora, después de esta parrafada, ¿tienes alguna duda o comentario? ¡No te cortes, ponte en contacto conmigo!